La explosión de una mina antipersona hizo que Mosha, una elefanta de 7 meses, perdiera su pierna derecha delantera. A medida que fue creciendo le resultó más difícil poder equilibrar su cuerpo, que para ese entonces era de 600 kilos.
Therdchai Jivacate, un doctor especialista en prótesis, le fabricó una. Jivacate conoció a Mosha en la fundación Amigos del Elefante Asiático.Se pudo dar cuenta que para que el animal caminara tenía que mantener su trompa elevada constantemente. Eso le permitía hacer sobrepeso.
En cada paso que daba, el elefante apoyaba sobre su pata delantera izquierda dos tercios de su peso. La presión era tanta que su extremidad se doblaba. Luego de varios ensayos, Jivacate logró construir una prótesis apropiada para Mosha. El doctor junto con su equipo logró que la pieza se ajustara a lo que quedó de la extremidad del animal.
Motola, otro elefante, también logró volver a moverse gracias a la ayuda del doctor y de la Fundación. A pesar de que el instrumento beneficia a los animales, su primera reacción es intentar quitarse las prótesis. Los especialistas se aseguraron de apretar fuerte la extremidad artificial para que los elefantes no pudieran removerla.
El peso actual de Mosha es de dos toneladas aproximadamente. Gracias a la solidaridad del doctor Jivacate podrá frenar los problemas de salud que le provocaba caminar con la trompa levantada y empezará a distribuir su peso en sus cuatro extremidades.
Fuente: www.elespectador.com