La misión se acercará hasta una zona conocida como la corona solar, que puede experimentar temperaturas incluso más calientes que la superficie del Sol.
Este miércoles la Nasa dará a conocer detalles de la primera misión que se acercará a la atmósfera del Sol y que según la agencia revolucionará la manera de entender a este astro.
La misión que se redenominó Parker Solar Probe, en honor al astrofísico Eugene Parker, que desarrolló la teoría de los vientos solares supersónicos y de la corona solar, se acercará a 6 millones de kilómetros de la superficie del Sol, lo que hará que esta nave experimente el calor y la radiación como nunca antes. La expectativa es que el lanzamiento de la sonda se dé entre el 31 de julio y el 19 de agosto del 2018. Hasta ahora, otras sondas se han acercado para examinar los vientos solares y la corona solar, pero nunca a una distancia tan corta, algo que podría responder muchas preguntas sobre el comportamiento del astro rey sin resolver.
“La misión entregará nueva información sobre la actividad solar y contribuirá a predecir los eventos climáticos del espacio y que impactan a la vida en la Tierra”, explica la Nasa. La sonda estará diseñada para recopilar datos en un ambiente de temperaturas extremas, con masivas cantidades de radiación y a una velocidad de 200 kilómetros por segundo, lo que permitiría ir de la Tierra a la Luna en media hora. "Simplemente hasta ahora los materiales para que esta misión fuera posible no existían", señaló Nicola Fox, del Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad Johns Hopkins, responsable de desarrollar parte de los componentes de la sonda. Para acercarse al Sol y orbitarlo a tan corta distancia, la sonda Parker será acelerada por el Delta IV Heavy, el cohete en servicio con la mayor potencia. Varias sondas lanzadas desde los años 60 han confirmado las teorías sobre el campo magnético del Sol y la existencia de vientos solares, y han permitido observar el comportamiento de la corona solar, que alcanza temperaturas más altas que la superficie solar. De acuerdo con la información de la Nasa, la idea con esta misión no solo es hacer ciencia básica sino entender los impactos de la actividad solar para la economía. Por ejemplo, según ha revisado la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos eventos solares de gran dimensión pueden causar daños hasta de dos trillones de dólares. Además, la costa oriental de ese país podría quedarse sin energía por cerca de un año.
Fuente: eltiempo.com